Todos sabemos lo que una sonrisa puede comunicar, y los dientes son esas perlas que se muestran cada vez que sonreímos. Mucho se dice sobre el cepillado de los dientes, sobre cómo hacerlo y completar el limpiado con el hilo dental. Sin embargo, el cuidado del esmalte ha quedado un poco ignorado en la información que se reparte por varias instituciones sanitarias, así como en la publicidad relacionada con la salud bucodental.

Por eso, en esta ocasión queremos contarte cómo cuidar el esmalte de los dientes, brindándote algunos consejos y buenos hábitos que te ayudarán a preservar esta capa tan valiosa de nuestras piezas bucales.

El esmalte de los dientes cumple la gran función de proteger los dientes del desgaste y la erosión que podrían ser causados por los alimentos que se mastican así como por los ácidos que estos contienen. Se trata de un material sumamente duro y resistente, que sin embargo puede llegar a verse erosionado si no lo cuidamos como se debe.

Ten cuidado con los alimentos y bebidas ácidos
La acidez contenida en muchas bebidas, especialmente aquellas que son carbonatadas o hechas a partir de cítricos, puede entrar en contacto tus dientes y erosionar el esmalte. Para prevenir esto, trata de no consumir estos productos en exceso o, si te gustan y son nutritivos como el jugo de naranja, trata de hacerlo con una pajilla (popote) para que pasen directamente a la garganta y no fluyan a través de tus dientes.

Neutraliza o enjuaga de tus dientes la acidez que consumes
Otra manera de contrarrestar la acidez que puede dañar el esmalte de tus dientes en enjuagar tu boca o tomar algún otro líquido que la neutralice. Por ejemplo, después de comer un alimento ácido puedes recurrir a enjuagar tu boca con agua para retirar el exceso de acidez. De la misma manera, si la combinación lo permite, puedes tomar un vaso de leche para que el calcio que esta contiene ayude a neutralizar esa acidez.

Evita las comidas muy azucaradas
Como sabemos, cuando el azúcar se acumula en los dientes tiende a permitir el crecimiento de bacterias que, en última instancia, producen compuestos ácidos que carcomen los dientes. Evita especialmente esas golosinas que tienden a pegarse a tus dientes, pues generan el escenario ideal para el crecimiento de bacterias que causan caries.

Ten cuidado con cómo y cuándo te cepillas los dientes
Cepillarse los dientes demasiadas veces al día o hacerlo de manera muy fuerte pueden erosionar también la capa de esmalte. Para evitar esto, restringe el número de cepilladas a las recomendadas por los odontólogos, no dures demasiado tiempo limpiando tu boca frente al lavabo y no utilices cepillos demasiado duros que no sólo podrían erosionar tu esmalte sino también lastimar tus encías.

Así mismo, espera por al menos una hora antes de cepillar tus dientes si has comido o bebido algo ácido. Esto se debe a que, inmediatamente después de estar en contacto con ese tipo de alimentos, el esmalte tiende a ponerse suave y cepillarlo en esa condición podría desgastarlo más rápidamente.